¿En qué proyecto estás trabajando actualmente?
Aunque me hago el misterioso, mi vida tiene poco de misteriosa. Eso sí, laburo mucho. Como hace siete años, sigo a full con mi blog principal Son Cosas Mías! También estoy muy entusiasmado con El Club del eBook, en donde comparto con amigos novedades y noticias del mundo de los libros electrónicos, y con A Mis Pies, dedicado a las zapatillas y accesorios. Doy clases en varios lados, escribo en Clarín y Noticias y los sábados a la noche acompaño a Fierita Catalano y a Noelia Marzol en "Hiperconectados", el programa de tecnología y cultura digital. Los lunes de 17 a 19hs me pueden escuchar en "Sucio Pop", un programa de radio con Matías Castañeda.
¿Cuáles son tus objetivos y planes a futuro?
Seguir trabajando mucho y avanzar en algunos proyectos divertidos que tengo entre manos.
¿Cuál es tu relación con los animales?
Nací y viví hasta que tuve 7 años en un departamentito muy pero muy chiquito. Así que mi único contacto con una mascota fue con una tortuga. Mi mamá le tiene miedo a los perros así que tampoco tuve mucha relación con los canes, a excepción de Corcho, la mascota de mi abuela. Después me mudé a una casa con un patio grande, pero nunca disfruté demasiado del aire libre, siempre fui un bicho de departamento. Todos mis hermanos heredamos la aversión de mi madre por los perros, lo que -créanme- te puede traer muchos problemas. Siempre está bueno darse la chance para aprender que no hay nada que temer. De hecho, para mí las cosas cambiaron cuando un ex adoptó un labrador. Ni bien me enteré de que llegaba un perro a la casa me pareció pésima idea, pero a los tres días la perrita -Pancha- se había ganado mi corazón. La vi crecer durante años y armé una relación como nunca tuve con un animal. Supongo que todos deben decir lo mismo, pero esta perra es la más linda de todas. Es más: fue modelo y apareció en un catálogo de un supermercado super importante (¡ya sueno baboso!).
¿Una anécdota graciosa con tus animales?
No sé si es algo gracioso, pero siempre recuerdo que estuve una noche entera ayudando a dar a dar a luz a Pancha. Nadie sabía bien cuántos perritos tenía en la panza (siempre fue rellenita), pero en seis horas dio a luz a 13 cachorritos. Los primeros 15 días con 14 perros fueron tragicómicos, pero sobreviví.
¿Un mensaje para nuestros lectores?
Como alguien que aprendió a estar cerca de animales de grande, sólo puedo decir que el mejor amor que se le puede tener a una mascota es quererla como lo que es: una mascota. Intentar que sea como un hijo, un hermano o un humano es un error. Cada animal tiene sus características y preferencias por su raza y personalidad, pero obligarla a ser como uno quiere (tenerla en un departamento ínfimo, sacarla a hacer pis cuando nos da la agenda y no cuando corresponde, etcétera) no tiene sentido.
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