Para los que tenemos animales, mudarnos es todo un tema. Hay muchas edificios y/o departamentos que "no aceptan mascotas". Eso nos achica las posibilidades y la búsqueda puede resultar eterna.
Por eso, en esta ocasión, queremos compartiles el relato de Vero, una chica que tuvo que mudarse a uno de estos edificios en donde no aceptan animales, pero que se movió, averiguó y hoy vive en ese mismo edificio muy feliz con su perra.
"Mi familia alquiló por más de 15 años en un departamento en donde por reglamento del edificio no se podían tener animales. El tema es que por una cuestión de fuerza mayor, me tuve que llevar a mi perra a vivir a ese departamento. Mi perra es una Dogo Argentino (incareteable) así que tuve que empezar con las cuestiones legales del caso porque ni mi perra ni yo nos íbamos a ir. Averigué en muchos lugares y nadie supo darme información hasta que di con un abogado que me asesoró gratuitamente. Lo primero que me preguntó fue si tenía notas firmadas por el consorcio obligándome a sacar a la perra, y la verdad es que tenía notas pero no estaban firmadas. El tema es que ESTÁ PROHIBIDO que los edificios y/o departamentos no acepten perros ni gatos o cualquier animal doméstico.
Hace un tiempo, la Corte Suprema de Justicia falló a favor de una señora y declaró a los animales domésticos como PARTE DE LA FAMILIA, que es lo que verdaderamente son. Ni siquiera hay obligación de aclarar que uno tiene un animal. Uno tiene que decir que se muda con SU FAMILIA y, una vez adentro, nadie puede decir algo porque uno les puede hacer juicio a ellos.
El resultado de mi lucha con el consorcio fue súper positivo. Era una torre muy concheta en Palermo y de un día para el otro empezaron a aparecer todos los perros que vivían ahí.
Un animal es parte de la familia y abandonarlo es como abandonar a un familiar. Hay que luchar por la familia. A mi no se me hizo fácil pero el resultado fue genial".
"Mi familia alquiló por más de 15 años en un departamento en donde por reglamento del edificio no se podían tener animales. El tema es que por una cuestión de fuerza mayor, me tuve que llevar a mi perra a vivir a ese departamento. Mi perra es una Dogo Argentino (incareteable) así que tuve que empezar con las cuestiones legales del caso porque ni mi perra ni yo nos íbamos a ir. Averigué en muchos lugares y nadie supo darme información hasta que di con un abogado que me asesoró gratuitamente. Lo primero que me preguntó fue si tenía notas firmadas por el consorcio obligándome a sacar a la perra, y la verdad es que tenía notas pero no estaban firmadas. El tema es que ESTÁ PROHIBIDO que los edificios y/o departamentos no acepten perros ni gatos o cualquier animal doméstico.
Hace un tiempo, la Corte Suprema de Justicia falló a favor de una señora y declaró a los animales domésticos como PARTE DE LA FAMILIA, que es lo que verdaderamente son. Ni siquiera hay obligación de aclarar que uno tiene un animal. Uno tiene que decir que se muda con SU FAMILIA y, una vez adentro, nadie puede decir algo porque uno les puede hacer juicio a ellos.
El resultado de mi lucha con el consorcio fue súper positivo. Era una torre muy concheta en Palermo y de un día para el otro empezaron a aparecer todos los perros que vivían ahí.
Un animal es parte de la familia y abandonarlo es como abandonar a un familiar. Hay que luchar por la familia. A mi no se me hizo fácil pero el resultado fue genial".
No se puede prohibir desde el consorcio, pero el dueño de un departamento que te alquila, no puede hacer la elección de alquilar el inmueble a alguien que no tenga mascotas? Tiene ese derecho? Es pura curiosidad.
ResponderEliminarEn los contratos de locación a veces ponen cláusulas donde te dicen que es motivo de cese de contrato si vos aparecés con perro, porque lo prohíben. A mi me está pasando algo parecido, me quiero mudar con mi novio y nuestra perra y muchos lugares me dicen de movida que no aceptan. Pero bueno, si tienen esa cláusula no sé si hay forma de remediarlo. Ahora, si no dice nada y es simple política de consorcio, ese es otro tema..
ResponderEliminarPero a esta altura no pueden decir esas cosas. Lo que deberían hacer es meterte cláusulas de que si rompen algo el inquilino se hace cargo, por lo menos! De los ladridos... bueno, nadie prohíbe el llanto de un bebé en los departamentos, y creo que es incluso más molesto.